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En plena incertidumbre general, y de la particular mejor no hablamos, tratando de no perder la sonrisa...

12 julio 2006

Crimen y Castigo

El título del post de hoy podía hacer referencia a la gran obra de Fiódor Dostoievski, en la que el autor nos mostró, como el peso de la conciencia, de la deontología interior, que nos acompaña en todos nuestros actos, tiene una importancia crucial, hasta el punto de que el protagonista, tras eleborar un crimen, por las circunstancias concomitantes a su ejecución, cuasiperfecto, se delata él mismo, no se sabe bién si es por un ataque de alterego, de querer demostar a las autoridades de que él lo hizo y no le descubrieron, o simplemente( y yo creo que esta es la postura que nos quiso hacer ver el autor) el peso de la moral en su horrible acción (el asesinato de una vieja usurera, de la que el se veía como pronosticado a liberar de ella a la sociedad), fue demasiada carga para su conciencia.

Pués después de este pequeño proemio, por otra parte ineluctable a la siguiente disertación, vamos con el asunto, el post de hoy está relacionado con los atentados en los trenes de Bombay, resulta que hoy al levantarme y echar un vistazo a la prensa diaria, leo en primera plana como esa lacra social, llamada terrorismo, a vuelto a actuar, y a lo grande vamos, nada menos que 190 muertos( de momento), y 625 heridos, al parecer provocados por la explosión de 7 bombas en trenes , casi simultaneamente.

Con estos desgraciados sucesos, yo quería traer de vuelta un viejo debate ético-político, que es el de la pena de muerte, estimados lectores, que castigo les dariais, si de vosotros dependiese, a los autores de esta masacre ( o a los autores de la masacre del 11-S, o del 11-M, o los atentados de Londres, o los atentados atribuidos a Euskadi Ta Askatasuna(Euskadi y libertad, ejem..)). De verdad después de este elevado número de víctimas es de retrógrado o anacrónico, el pensar que lo único que se merece esta gente es la muerte? , para mi no, desde luego; Todos los terroristas, absolutamenete todos, no son merecedores de otra cosa, que el infligirles a ellos en su propia carne, el sufrimiento que ellos han provocado a otras personas.

Y esto vale tanto para los terroristas internacionales, estos fanáticos religiosos que con su Yihad están causando miles de muertos, como para los autóctonos(ETA). Los que están en contra de esta postura, se aferran a la convención de Derechos Humanos, a los logros de nuestra sociedad democrática y tal, además exponen(no sin acierto en esta porción del problema), que la implantación de la pena de muerte, además de quedar ya obsoleta, es ineficaz, debido a que en paises en los que se ha suprimido, no han aumentado los delitos que darían lugar a la misma; Pero para mi todos estos argumentos son insuficientes, respecto este determinado sector de la sociedad que es el terrorismo, dado que yo los consideraría asociales, pués no quieren pertenecer a la sociedad preestablecida, ni quieren respetar sus normas, creadas a partir de un consenso político y social, por lo tanto yo defiendo que para este tipo de parásitos se imponga la pena de muerte, por que no son merecedores de otra cosa, porque todos sus crímenes , además de premeditados están subordinados a unos fines político-religiosos, que en ningún caso merecen vidas humanas(ningún fin, sea de la índole que sea merece precio humano).

Por eso , yo desde aqui quería además de defender la implantación de esta pena para los terroristas, recordar en estos momentos que nuestro gobierno está"negociando" con ETA, que no deberían concederles ningún precio político a esa lacra; Se van a cumplir 9 años desde la muerte de Miguel Angel Blanco, yo era un crio pero todavía me acuerdo, de como todo el país estuvo pendiente del televisor hasta última hora, para ver si los terroristas le perdonaban la vida a pesar de sus amenazas de llevar a efecto el asesinato, si no se cumplían sus exigencias, no, no puede haber ni precio, ni concesión de ningún tipo con esta gente, ni en nuestro país, ni en el ámbito internacional.

Espero no haber herido la susceptibilidad de nadie con el comentario, creo que es un tema muy importante y desgraciadamente actual, un saludo a tod@s.

3 Comments:

Blogger Erayo Peroyano said...

Creo que ya sabes lo que opino sobre este tema... porque ya hemos hablado de ello más de una vez y de dos. Y pese a los muertos de Bombay, sigo pensando lo mismo: Un Estado de Derecho no se puede permitir el lujo de cobrarse vidas humanas que le estorven (y estas estorvan demasiado, pero son vidas, al fin y al cabo). Dices en tu comentario que ningún fin político o social justifica la muerte de una persona: cierto y de acuerdo estamos, tampoco el fin político de mantener indemne al Estado de Derecho y a sus ciudadanos justifica muertes, aunque sean de esas ratas terroristas. ¿Por qué?, porque nosotros hemos de estar un paso por delante de ellos, y demostrarles que no necesitamos matar para conseguir nuestros fines, y que, si alguno no conseguimos por no haber matado, al menos tendremos las manos limpias de sangre. Por no decir de qué pasa si un inocente es condenado a muerte por terrorista... que casos se han dado, y si no que se lo pregunten a más de dos y tres que dieron con sus huesos en Guantánamo, y si bien no fueron condenados a muerte, sí fueron -y son- sometidos a tortura por orden de la Administración Bush, sin juicio previo, y la mayoría sin más prueba en contra que estar en el lugar equivocado en el peor momento.
El limitar el derecho a la vida o a la integridad física por razones de terrorismo supone ya de por sí reconecerle una victoria al terrorismo, es claudicar ante sus formas, asumiéndolas como propias y transmitiendo el mensaje de que no podemos acabar con esta lacra a través de los mecanismos ordinarios del Estado de Derecho (y aquí me pregunto: ¿tiene el Estado de Derecho mecanismos extraordinarios?, o ¿deja de ser Estado de Derecho cuando tales mecanismos actúan?) y que por ello recurrimos al tiro en la nuca, a la silla eléctrica, la cámara de gas, la inyección letal, la horca, el garrote vil, la guillotina, el pelotón de fusilamiento o lo que en cada momento exija una conciencia social sedienta de sangre y de víctimas en el otro lado.
De todas formas ¿para qué matar a alguien que socialmente ya está muerto?, como dijo Wolf Biermann Qué cerca sentimos a algunos que están muertos; y qué muertos nos parecen otros que aún viven. Esto se lo aplico yo al terrorismo y a sus efectos, porque considero muy cerca a las víctimas y muertos a los terroristas, en términos morales y de conciencia, claro.
Y aún hay más, con la imposición de condenas de muerte a estos tipos se crearán mártires, no simples terroristas, y ya sabemos -por desgracia- qué efectos tienen estos mártires en algunos grupos sociales... Y tú mismo has hecho referencia a la carga criminógena inherente a la pena de muerte tantas veces demostrada. Lejos de reducir el terrorismo, lo que va a hacer la pena de muerte es aumentarlo, al igual que sucede en todos los países en los que está implantada en relación con las estadísticas de los delitos con ella castigados, que se disparan.
Más razones tengo, y creo que alguna vez te expuse todas en un post de uno de mis blogs, y veo que no has cambiado de opinión, jeje -yo tampoco-. Aunque en ocasiones como estas la rabia hace que me replantee todo esto, cuando se me enfría la cabeza, vuelvo a pensar lo que por aquí dejo plasmado.

Un saludo!!.

jueves, 13 julio, 2006  
Blogger Javi said...

Gracias por tu comenterio Roberto, como siempre excelente e irrefutable, aunque no por ello, vaya a cambiar de opinión.
Aludes,lo cual ya me habias comentado en uno de tus post, a no ponernos al nivel de los terroristas utilizando sus mismos métodos, yo no lo veo asi, lo veo mas bién al merecimiento que ellos tienen de acuerdo a su conducta, que aunque sean personas, ya no son dignas(según mi opinión que conste) de que sean medidas con los mismos baremos, que el resto de los ciudadanos. Además, yo si creo que el Estado de Derecho debe permanecer incólume, aunque sea a costa de estas vidas humanas; ¿Que vale la vida de una persona?, y ¿ La de una persona, que mata a otra persona?, valen lo mismo, para ti sin duda, de lo que infiero de tu comentario y otros que por ahi han quedado reflejados, si, y yo creo que no, que la vida de un terrorista no vale lo mismo que la de otras persona.
Un terrorista en un principio, al menos eso creo, está incorporado a la Organización de motu proprio, o no?, hay tenemos el caso de los milis(porción de ETA militar, que tras la escisión de 1982, seguieron matando), y los polimiris(porcion de ETA, que buscando los mismos fines, pero por la via diplomática, se separó de la facción asesina), por lo tanto, dado que están de forma voluntaria, de ellos depende en ultima instancia(en el caso de los asesinos inmediatos), el ejecutar el asesinato o no, es decir, todos y cada uno de sus miembros individuales son responsables de todas y cada una de las muertes que provocó la organizacion terrorista. Si ellos lo han decidido asi, pues que paguen por ello ,ellos han podido evitarlo, y aun asi, han continuado, no Roberto, no merecen que se les trate al igual que al resto de los ciudadanos, dado que son un caso extraordinario de sujetos, se les deben aplicar medidas extraordinarias, como es este tipo de pena, eso si, siempre y cuando quede bien cemostrado, su pertenencia y participación, por supuesto, que dada la gravedad de la pena, no puede quedar ni un resquicio de duda, en este sentido.
Aqui estamos ante un problema muy serio, no podemos utilizar las leyes democraticas como medida ejemplificadora a los etarras, de que con los mecanismos del estado de derecho se pueden conseguir todos los fines, porque ellos no utilizan las mismas reglas de juego.
Aunque , que conste, que yo no se la solucion para erradicar este problema, eso es algo muy complicado, si fuera muy sencillo, alguno de nuestros politicos, que son una pandilla de incompetentes tanto de uno como de otro bando, y solo piensan en alcanzar el poder y llenar la saca una vez alli, pues yo pienso que alguno hubiese dado con la manera de solucionarlo, pero a mi me da que esto va para rato, y no veo, pese a la sonrisa de ZP,solucion a corto plazoY claro, realmente, lo que esta probado y demostrado, es que con los mecanismos del Estado de Derecho no se puede acabar con el terrorismo, no si no se pagan enormes precios politicos, aqui la unica solucion es apretar y apretar, hasta que no tengan medios ni razon de subsistencia, como hasta ahora venia pasando, pero en el momento actual, no se hasta donde nos va a llevar este proceso.
En cuanto a la condicion de martir, a quien a matado con un tiro en la nuca y ha extorsionado hasta la saciedad, tengo mis dudas, en todo caso serian martires para una minoria.
Bueno Roberto, un saludo, me vuelvo a imaginar en que no estaras de acuerdo conmigo, pero ya sabes que esta es mi opinion sobre el tema, por lo demas como siempre admirado de tu argumentacion, perfecta donde la haya.

jueves, 13 julio, 2006  
Blogger Erayo Peroyano said...

Nuestro desacuerdo en este tema va para eterno y lapidario, y quede claro que les tengo yo tanto asco como tú, no me atrevo a decir que más, sean terroristas del signo que sean.
¿Los terroristas no son personas?, o ¿no son personas como las demás?... que algo falla en sus cabezas es evidente, pero es muy peligroso que en un Estado de Derecho empecemos a distinguir quiénes son y quiénes no son personas... Para los fascistas los comunistas y masones no merecían vivir, no eran personas (y la máxima se amplió a más grupos, pero no te voy a dar lecciones de historia que de sobra conoces), los comunistas de Stalin, a su vez, consideraban que ni los fascistas, ni los trotskistas ni otras muchas personas, no eran tales y no merecían vivir, los negros hasta hace no mucho no eran tenidos por personas por loa estadounidenses o por los boers sudafricanos, y ni que decir tiene lo que opinaban los nazis de los judíos, y el cómo actuaban sobre ellos... y podríamos seguir así hasta tiempos inmemoriales, en los que ciertas personas consideraban que otras no eran personas y que por eso podían exterminarlas. No comparo a todas estas víctimas inocentes con los terroristas, que de inocentes no tienen nada, pero no me negarás que en el momento en que una sociedad abre la veda para matar reos de delitos como el terrorismo, luego es difícil frenar la vis expansiva inherente a estas contundentes medidas, y acabará ajusticiándose hasta al que roba manzanas en la huerta de su abuela. Estaré exagerando, pero es que me da pánico que se justifique el asesinato de un ser humano (por muy semejante a las ratas que sea) porque haya asesinado a otro ser humano. Por cierto, unos asesinarían por sus ideas, nosotros por las nuestras, pero ¿quién decide por qué ideas se puede matar y por cuáles hay que matar a quien mata por ellas?, complicado ¿no?. Por lo que mejor dejar las cosas como están, y el Estado de Derecho se acabará imponiendo ¿o van a ganarnos cuatro imbéciles con cuatro pistolas y un par de bombas? A mi no, desde luego.

Un saludo. Y disfruta de esta noche... que vaya calores!!!

jueves, 13 julio, 2006  

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