Jam Session

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En plena incertidumbre general, y de la particular mejor no hablamos, tratando de no perder la sonrisa...

30 octubre 2006

Economía doméstica o no tan doméstica.

Yo no se a vosotros si os pasará igual, pero lo que es a mi no me dura el dinero lo mismo, no se, a lo mejor son cosas mías que me lío y me mortifico las neuronas por cualquier cosa, pero el caso es que a mi no me da el dinero de si lo mismo que me daba antes.

Si, ya se que a estas alturas que ya llevamos unos cuantos años con el euro, que me preocupe ahora…pero es que yo sigo “cobrando” la misma propina que cuando entraron en vigor los billetes del monopoli, y claro, no cunden lo mismo, una de dos, o el nivel de vida ha subido mucho, y yo no me he enterado, porque la nómina de mi padre no ha reflejado en la misma proporción la subida de los precios que se ha experimentado en la vida, o realmente el valor del euro, aunque nos lo pinten como el dólar mas o menos, vale menos que la anterior peseta. El caso es que se compra menos y peor que antes con nuestra defenestrada peseta.

Una de las situaciones en las que se ve evidentemente esta situación, es al salir de fiesta. Uno antes salía con dos mil pelillas, y tenía para alegrías todo el fin de semana, y todavía sobraba algún remanente para darse un caprichillo, pero ahora…uno sale con ese dinero, y como no ponga el culo en Papalaguinda de camino al Húmedo, no tiene ni para ir calentando.

Claro, esto en cuestiones de fiesta, pero pasa igual con todo, uno antes con 10 o 20.000 pesetas tenía para comprarse ropa todo el año, y de la buena, pero ahora uno sale con 60 o 120 euros de casa y se trae como mucho dos o tres prendas, encima de peor calidad que la que antes nos podíamos permitir por el mismo dinero.

Incluso la cesta de la compra, y me estoy refiriendo a la ordinaria, no al Índice de Precios al Consumo, nota estas cosas. No voy a hacer alusión a la famosa cesta de Lidl porque creo que todos sabemos que eso de que con 60 euros tu carro lleno, ¡nanai!, pero es que ha subido todo, el pan, la leche, los huevos…como decía, menos las nóminas que esas si que se mantienen estables y anquilosadas en el nivel de vida pretérito el resto de la vida se ha disparado.

Sería demasiado fácil echar mano al precio de la vivienda para reflejar esta caótica situación, así que no lo voy a hacer, creo que todos sabéis como están las cosas. El post de hoy lo ha inspirado a parte de que he ido a hacer la compra al Super, que ya hacía “siglos” que no me pasaba por allí y he flipado literalmente, el hecho de que parece que todo el mundo expresa o implícitamente está de acuerdo con nuestra actual situación económica, y oye, que yo no la veo tan bien, no se, a lo mejor estoy confundido, pero no se hasta que punto el hecho de que se hayan disparado los precios de todo nos va a beneficiar, si, subirá el PIB a corto plazo, y el nivel de vida, y seguirá disparándose la inflación y todas esas cosas de bien que se producen cuando disfrutamos de nuestro actual superávit, pero que va a pasar después…ya veo yo a los economistas echando balones fuera, los mismos que ahora presumen de la gestión del señor Solbes, tan poco cuestionado en su actual gestión, ya veremos, ya veremos.

Un saludo a tod@s.

2 Comments:

Blogger Erayo Peroyano said...

En los modernos cuentos para meter miedo a los niños los monstruos ya no serán el Coco ni el Hombre del Saco, sino que serán la Señora Inflación, el monstruo de la Pérdida de Poder Adquisitivo, la señora Hipoteca... Deberías de pactar con tus progenitores el que te actualicen anualmente la propina conforme al IPC, que siempre va a ser menos que la subida real de la inflación, pero algo es algo.

Un saludo.

martes, 31 octubre, 2006  
Blogger Javi said...

Buenas Roberto,jajajajaja,no se porque me da, que mi adorable padre no iba a entender lo de las actualizaciones y me iba a quedar el bolsillo en el mismo estado, otro asunto sería el estado de mi colleja tras proponérselo, a lo mejor ésta si que experimenta un incremento de escozor y color rojizo,jejeje, ya sabes como se ponen los padres con las tendencias inflaccionistas.
Un saludo.

viernes, 03 noviembre, 2006  

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