Nuestra infancia
Aunque todavía somos unos chavalines, creo que viene bien recordar de vez en cuando como pasamos aquellos maravillosos años de atrás, y a ello voy. Nosotros no pertenecemos a la era de los ordenadores, los móbiles y demás tecnología, eso esta claro, por eso quiero recrear aqui como se vivió, al menos desde mi óptica aquellos años.
Hoy dia a partir de los 9 años, todo ser que se precie de serlo, dispone de móbil. Eso tiene sus ventajas y sus inconvenientes, como todo. En mis tiempos para quedar, uno tenía que patearse todo el barrio para reunir a la pandi, nada de teléfono, que estaba caro; nuestra pandi se hacia llamar, los rompehuesos, si ya se, direis que ¿qué duros no?, pues en cierta medida si lo eramos. Teniamos un saludo especial, plagiado de la serie en boga del momento, que era, "el principe de Belair"(creo que se escribe así), y al menos que nos viese una pandi mas dura que nosotros mismos y nos diesen un collejon por duros, eramos felices con dicho distintivo.
Si, eramos duros, no jugabamos con las chicas, aquello daba mala imagen para unos tipos duros como nosotros, todo lo mas , las pegabamos pelotazos en la cara o las quitabamos la goma y se la rompiamos, en fin, todo actividades que fomentasen la masculinidad. Otra cosa, era cuando venia la madre de dicho encanto al que minutos antes le habias tirado del pelo para darte un bofetón. Primera regla:¡ no llorar nunca!, los hombres no lloran delante de sus amigos, por mucho que te hubiese escocido el mamporro de la paisana, había que resistir como fuese las lagrimas, ya se desahogaria uno cuando llegara a casa.
El concepto de masculinidad también está muy cambiado respecto mi época, todavía recuerdo lo cabizbajo que estaba porque no me salían pelos en las piernas y en los... pero ahora, mis fornidos colegas de pandi se depilan, y uno no es mas hombre porque tenga mas pelo.
Otra actividad a la que dedicabamos los veranos, en ausencia de ordenadores y nuevas tecnologías, era el fútbol, todo lo que daba de sí el dia lo dedicabamos a dicho deporte. No habia tiempo para andar con chicas, chatear o jugar a la Play. No, lo importante era jugar y jugar, y a ser posible emular a los protagonistas de Oliber y Benji, una serie de dibus, en la que se tiraban tres capítulos desde que el jugador tiraba, hasta que el balón llegaba a la porteria.
Las chapas, esto eran palabras mayores, no era una pecata minuta. Con una caja de cartón, se partía a la mitad y ya tenias las porterias, 11 chapas para formar tu equipo de futbol chapa ( la del portero de gaseosa, las otras estandar tipo Mahon), y el esférico, pues un surtido de garbanzos (pues se requerian" balones de repuesto"), surtido que se hurtaba de la cocina de nuestras dichosas madres y que como te pillaran te escamochaban. Tras el partido, se subía a casa a merendar, preferentemente nocilla o pate; no como ahora, que vienen a pedir dinero los chavales para comprarse un kebá(esto tampoco se como coño se escribe). Cuando la madre de uno muy gustosamente iba a preparar el bocata , bajaba la cabeza y lo veía , si, primero te pegaba la torta y luego te lo explicaba (y en algunos casos se hacia repeticion de la torta para regocijo de tus colegas), tenias las rodillas llenas de mugre, por agacharse en la carretera a jugar y tal... con lo que por la noche tocaba frotar con un cepillo de puas , que rianse de los pinchos del cilicio de los del Opus.
Las tardes que no se realizaban estas actividades, básicamente se dedicaban a hacer , perdonenme la expresión, el cabrón. Si tipo ir a mangar a la tienda cromos de bollicao( si, he dicho cromos, habriamos el bollicao, cogiamos el cromo y dejabamos alli el bollicao, ¿inteligente verdad?), o ir con las mozas del barrio; si, esas a las que solo nos acercabamos cuando uno se aburria y no habia mas remedio. Ni que decir que eramos repudiados como bichos, con lo que vuelta a tirarlas del pelo o quitarlas la goma, lo de verlas las braguitas o tocarles el culito llegaría mas tarde, cuando maduramos un poco mas, pero eso sera tema para otro dia, un saludo a tod@s .
Hoy dia a partir de los 9 años, todo ser que se precie de serlo, dispone de móbil. Eso tiene sus ventajas y sus inconvenientes, como todo. En mis tiempos para quedar, uno tenía que patearse todo el barrio para reunir a la pandi, nada de teléfono, que estaba caro; nuestra pandi se hacia llamar, los rompehuesos, si ya se, direis que ¿qué duros no?, pues en cierta medida si lo eramos. Teniamos un saludo especial, plagiado de la serie en boga del momento, que era, "el principe de Belair"(creo que se escribe así), y al menos que nos viese una pandi mas dura que nosotros mismos y nos diesen un collejon por duros, eramos felices con dicho distintivo.
Si, eramos duros, no jugabamos con las chicas, aquello daba mala imagen para unos tipos duros como nosotros, todo lo mas , las pegabamos pelotazos en la cara o las quitabamos la goma y se la rompiamos, en fin, todo actividades que fomentasen la masculinidad. Otra cosa, era cuando venia la madre de dicho encanto al que minutos antes le habias tirado del pelo para darte un bofetón. Primera regla:¡ no llorar nunca!, los hombres no lloran delante de sus amigos, por mucho que te hubiese escocido el mamporro de la paisana, había que resistir como fuese las lagrimas, ya se desahogaria uno cuando llegara a casa.
El concepto de masculinidad también está muy cambiado respecto mi época, todavía recuerdo lo cabizbajo que estaba porque no me salían pelos en las piernas y en los... pero ahora, mis fornidos colegas de pandi se depilan, y uno no es mas hombre porque tenga mas pelo.
Otra actividad a la que dedicabamos los veranos, en ausencia de ordenadores y nuevas tecnologías, era el fútbol, todo lo que daba de sí el dia lo dedicabamos a dicho deporte. No habia tiempo para andar con chicas, chatear o jugar a la Play. No, lo importante era jugar y jugar, y a ser posible emular a los protagonistas de Oliber y Benji, una serie de dibus, en la que se tiraban tres capítulos desde que el jugador tiraba, hasta que el balón llegaba a la porteria.
Las chapas, esto eran palabras mayores, no era una pecata minuta. Con una caja de cartón, se partía a la mitad y ya tenias las porterias, 11 chapas para formar tu equipo de futbol chapa ( la del portero de gaseosa, las otras estandar tipo Mahon), y el esférico, pues un surtido de garbanzos (pues se requerian" balones de repuesto"), surtido que se hurtaba de la cocina de nuestras dichosas madres y que como te pillaran te escamochaban. Tras el partido, se subía a casa a merendar, preferentemente nocilla o pate; no como ahora, que vienen a pedir dinero los chavales para comprarse un kebá(esto tampoco se como coño se escribe). Cuando la madre de uno muy gustosamente iba a preparar el bocata , bajaba la cabeza y lo veía , si, primero te pegaba la torta y luego te lo explicaba (y en algunos casos se hacia repeticion de la torta para regocijo de tus colegas), tenias las rodillas llenas de mugre, por agacharse en la carretera a jugar y tal... con lo que por la noche tocaba frotar con un cepillo de puas , que rianse de los pinchos del cilicio de los del Opus.
Las tardes que no se realizaban estas actividades, básicamente se dedicaban a hacer , perdonenme la expresión, el cabrón. Si tipo ir a mangar a la tienda cromos de bollicao( si, he dicho cromos, habriamos el bollicao, cogiamos el cromo y dejabamos alli el bollicao, ¿inteligente verdad?), o ir con las mozas del barrio; si, esas a las que solo nos acercabamos cuando uno se aburria y no habia mas remedio. Ni que decir que eramos repudiados como bichos, con lo que vuelta a tirarlas del pelo o quitarlas la goma, lo de verlas las braguitas o tocarles el culito llegaría mas tarde, cuando maduramos un poco mas, pero eso sera tema para otro dia, un saludo a tod@s .
9 Comments:
¡Qué recuerdos! si es que... no tendríamos tecnología, pero imaginación nos sobraba. Ahora todo aquello lo están echando a perder cuatro cables y unos cuantos botones. A todos los juegos que has enumerado he de añadir que, siendo como soy de pueblo aquí las limitaciones eran menos si cabe: menudas casetas nos hacíamos con plásticos, cartones y palés... y se le declaraba la "guerra" a otra pandilla... y a defender la caseta con tirachinas y capalobos 8no se cómo hemos llegado algunos a esta edad con los dos ojos). Y las horas que no pasaría yo a lomos de la mountain bike, de aquella bici de montaña... ¡y nada de alumino!, que pesaba sus buenos kilos. Todavía la tengo (echa un asco, eso sí) y me la compraron para la comunión. A esa bici le debo el 90 % de las cicatrices que iluminan mi cuerpo. Los partidos de fútbol que duraban toda la mañana y seguían después de comer... si me pongo ahora me muero. Luego cada par de meses se llevaba en el colegio un juego distinto: las canicas, la peonza... los modernos tazos... Y en verano las interminables horas de piscina, cada uno jugándosela a ver si superaba el salto que había hecho otro, eso sí, cuando no mirara el socorrista. Y eso sólo fue la infancia... y las cosas que se me olvidan.
Todo eso se está perdiendo, tenemos que dar gracias por haber nacido cuando nacimos.
Un saludo, de otro miembro de la generación del Barrio Sesamo y de picar al timbre de la puerta "para dar un toque".
je,je,je, buenas Roberto¡¡ tienes razón, yo tampoco cambiaria mis años por los de esta nueva generación.
Comparto contigo los peligros de la bici, yo tambien fuí sangrando para casa de codos, manos y rodillas por culpa de la susodicha, y antes de que llegasen las de montaña, supongo que te acordaras de las de cross, si esas que cuando te la pegabas, se resentian tus partes.
Aqui tambien habia guerra de pandillas, pero al rato ya estabamos otra vez jugando al futbol.
Y de los dibujos¡¡¡ eso merece un post aprte para otro dia fijo.
Un saludo¡¡
Joder lo que me está costando escribir algo aquí
Lo he consequido!!!!!!!!!!!!!!
Bueno ahora que ya he conseguido saber como cojones se escribe en el invento este, te voy a dejar unas líneas en referencia al blog de hoy (joder que fisno soy).
Comparto contigo la visión de nuestra infancia, más que nada porque gran parte de ella la pasamos juntos. Aquellas tardes sentados en un puto portal (en el que no te olvides que meó Jesus el gemelo) sin nada que hacer, mirando a las apabardas, marcan a cualquiera. No teníamos dinero, ni nos hacía falta, ya que todo lo que necesitabamos lo conseguíamos del entorno (bollicaos, gominolas, tabletas de chocolate...todo ello en hiperchori...quiero decir en Hipergol).
SI la verdad es que nuestra infancia fue buena, jeje, pero creo que en este ejercicio de memoria se te ha olvidado un pequeño detalle sin el cual no se habrían formado nuestras espectaculares personalidades. Si pequeño, como te imaginarás me refiero a los he-man, caballeros de zodiaco, oliver y benji, chicho terremoto, transformers, las monstruo plantas (de las que nunca se volvió a saber), aquellas series que veíamos con la buena compañía de un buen bocata de nocilla, y tras las cuales salíamos flipadines completamente a la calle creyendonos capaces de realizar la catapulta infernal, o ver las bragitas rosas de las chicas.
Hoy día tienen a los pokemos, los digimos, las 3 mellizas...en fin. Que ante este panorama no me extraña que su poder imaginativo sea nulo.Y si a esto se le añade la play station...
Bueno que creo que me estoy extendiendo demasiado y tengo el nba live esperándome :D.
Un besín y ha sido un placer el participar por primera vez en tu blog, espero que la pereza no me venza y escribir en más ocasiones.
Buenas alex¡¡¡me alegro de que te hayas animado y espero tenerte por aqui mas veces.Ni que decir tiene que todo lo anteriormente descrito te tiene que sonar bastante,jajajajaja.
Que nos quiten lo bailado¡¡¡aquellas tardes que tu mencionas, sin nada que hacer... creo que teniamos un par de mozas por ahi rotas no?? o por lo menos se hacian las duras como se dice ahora,jajjajajj.
Un saludo Alex.
jajajajja, buenas Jose, yo tambien era el niño gordito que me pillaban y me vareaban, aunque no se como, pero cuando las mangabamos corriamos a una velocidad de la hostia ¿no?.
En cuanto a ese pequeño vicio, mejor no cuento los mios por no subir de tono los comentarios, jejejjeje.
un saludo¡¡
hola muy buenas. estba bsucando en google infromacion sobre los capalobos y me llevo aqui y me alegro.
yo me estoya cordando de muchas cosas de las que hablais.
me acuerdo que no apsabamos de los palos y predeadas al futbol
si no al reves el acababamos discutiendo por las flatas y empezabamos a hacerlo mas a lo bestia asta que nos dabamos de palos.
y luego als guerras de globos de agua .. y de nieve cuando habia.
y tambien jugabamos a cabezas era de 4 personas.
2 se ponian en 2 columpios uno se ponia x detras y otro por delante.
eld e tras e la tiraba al otro a la cabeza y la tenia ke meter a los que taban senatdos en el columpio.
y luego tambien los tazos y las canikas. eso era para los recre0s
tengo una caja de zapatos llena de ellos xD.
Pero luego pase al insti y se cabo todo eso me gsutaria que hubiese durado mas.
ahora mismo tengo 16 años y veo eso como una cosa lejana.
yo soy de leon y vosotros??
mira os voya poner mi msn
siox3beta@gmail.com
Buenas Carlos¡¡ gracias por tu comentario. La situación que describo en dicho post ya hace algunos años que pasó, pero la verdad es que estas cosas con el paso de los tiempos se ven de otra manera y hacen a uno pensar un poco.
La mega pandilla aqui descrita, también es de León, pero ya contamos todos nuentros componentes entorno a los veintitantos años.
Me alegra que haya gente joven que ademas de divertirse, les de por leer y participar en toda clase de foros, para que luego digan las madres que el internet es solo para charlar con tus amigos a traves del mesenger.
Un saludo Carlos, espero que te pases por aqui mas veces, y no te fies del título de los post, que raras veces tienen que ver con el contenido.
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