Jam Session

Política, literatura, sociedad, música

Correspondencia: fjsgad@gmail.com
Mi foto
Nombre:
Lugar: León, Spain

En plena incertidumbre general, y de la particular mejor no hablamos, tratando de no perder la sonrisa...

29 febrero 2008

Reminiscencia con moraleja.

Se llamaba Julio. Su profesión no consistía en otra cosa que repartir ilusiones cada mañana desde las primeras horas del alba. Actividad, que prolongaba a lo largo de todo el día: con la misma sonrisa cordial, el mismo espíritu perenne y ese trato correcto, serio y adecuado que le hacía ganarse, poquito a poco, la confianza y respeto del barrio. Un barrio en que la palabra igualdad alcanzaba valor y veracidad en cada una de las personas que lo habitaban; obteniendo, dicha palabra, un significado justo, real, visible, contante y sonante como antaño recitaban las almas más leídas de la parroquia.

Julio era quiosquero: oficio que le obligaba a cultivar una cierta psicología social por su ininterrumpido trato con personajillos de la más diversa índole; pero, a diferencia de otras personas de su misma grey, los destinatarios de su afabilidad no eran sólo las almas cándidas, piadosas, ingenuas, pícaras y, a la vez, algo bobaliconas de los chiquillos del vecindario, siempre tan dados a escuchar la retórica meliflua, melindrosa y empalagosa de cualquier oferente de chucherías, sino todo aquel que a la hora de comprar la prensa para el papa, la Hola para la mama o la Cosmopolitan para la hermana de lencería caprichosa, tenía a bien intercambiar unas palabras con él.

Mucho tiempo ha pasado desde que éste que les escribe era un retaco de medio metro que acudía raudo con sus cinco duros, auténtica fortuna en aquellos maravillosos años, ha proveerse de víveres indispenseibols. Mi ojo insatisfecho recorría con avidez y codicia, raudo como los pies del escurridizo gitanillo cuya vida destina al latrocinio, los enseres de juguete ubicados pseudoestratégicamente en los anaqueles del raquítico pero bien provisto establecimiento. La desmesura mayúscula mostrada a la hora de pedir por la linda boquita que la genética puso en mi rostro, en presencia de mi madre, se convertía en motivo de una razonable torta no tanto por la actitud pedigüeña propia de toda criaturilla como por el derroche fútil de mis pretensiones, siempre tan elevadas.

Con el paso de los años y su ineluctable suma en el DNI y en la vida, esta característica, casi grotesca, se ha trocado en su inversa. La vida va dejando sus huellas en todos nosotros; algunas son casi imperceptibles, y van creciendo y desarrollándose en nuestro interior en absoluta latencia. Para cuando se manifiestan, en momentos en apariencia tan triviales como dar la razón a nuestros padres, se dice que es un síntoma de madurez; pero, tan solo es un signo más de envejecimiento o de pérdida de juicio, a veces, definitivo.

Antes que hombre, Julio era tendero. Incluso antes que marido, padre o vecino. Cuando una persona lleva a estos límites su profesión, como saben, tan sólo le queda ser feliz en su propia cama. Y con su propia esposa. O, al menos, con otra muy parecida. El problema, en el caso que nos ocupa, consistía en que la mujer de Julio no era tendera. No tenía sus mismas aspiraciones. Sus mismas metas. Sus mismos anhelos, deseos o preocupaciones. Su sino no era vender piruletas, chupa chups, gusanitos, triskis, palomitas, regalices, tabaco, condones homologados por la NsF (ninfómanos sin fronteras)…no. Su verdadero destino era no estar siempre al lado de Julio. Sin importarle el aparente feeling que les unía y hacía felices y dichosos. La monotonía, cuyos arrebatos más pronunciados se asegura que abaten incluso a hombres de Dios, ataca con fiereza, gallardía y tesón tentando a las almas más puras, impolutas e inquebrantables.

Como resultado y moraleja a tener en cuenta, tenemos la vaguedad o imprecisión del término propiedad. No voy a decirles o aclararles si la cuestión recae sobre su propia cama o sobre su propia mujer. Les dejo meditarlo. Por cierto, no sé qué pudo ser de Julio. Y, para sosegarles, les diré que tampoco tengo muy claro que la fuente de la que me he inspirado sea de fiar. Al menos, tanto como la mujer del tendero: que Dios tenga en su gloria y en sus arrabales cuando le llegue su hora.


Egos tan descarados como ocurrentes: “la fidelidad es la constancia y exclusividad con que un determinado sexo penetra o es penetrado por otro igualmente determinado, o se abstiene de ser penetrado o de penetrar” Javier Marias; “si hubiera querido una relación convencional, tendría que haber escogido a una mujer convencional” Kem Follet. Es un verdadero placer, grande y vanidoso, tenerles ahí detrás aunque no se manifiesten; por ello les agradezco que me lean, y, aún más, que me aguanten. Buen fin de semana.

Para que vean que no soy especialmente parcial; aquí les va la réplica socialista:

Más larga y más mala que la del PP. Los señores socialistas, al parecer, no son lectores de Gracián. Además, una diferencia notable: en el vídeo del PP (lo tienen un par de post por debajo) el objeto es la desastrosa política llevada a cabo por el PSOE y sus nefastas consecuencias; en el vídeo del PSOE, en cambio, el objeto son los dirigentes del PP. Dos modos de hacer humor, dos modos de hacer política, dos modos de llevar las cosas a cabo. Ustedes, como siempre, deciden.

28 febrero 2008

¿Quién no ha querido alguna vez despegar los pies del suelo...

...bailando, tal vez, una rumba?

27 febrero 2008

Juan Pedro Quiñonero, columnista de ABC; ¿confianza en los sondeos y en los medios? ¿cómo se titulaba aquella canción de Rafael? hombre, hombre.

Una vez más, los hechos desmienten a la propaganda. Escribir una columna política es tarea complicada. Siempre se le ve a uno el plumero ideológico aunque pretenda mantenerse imparcial. Y, por ello: siempre se pierde credibilidad; aunque se lleve razón en lo narrado. Aún no he leído lo expuesto por Arcadi; sí, en cambio, he leído la fabulosa crónica de Camacho y el esclarecedor post de Santi González; éste último, con los incontestables datos de hoy sobre la mesa: el señor ZP ha suspendido dos actos electorales para preparar el debate de vuelta y pidió al llegar a la sede del PSOE que le pusieran el vídeo del debate. ¿Sabor a victoria? sinceramente, no lo parece. Algún cronista socialdemócrata ha intentado aferrarse, patéticamente, al bonobús y al cuento de la niña con el que Rajoy finiquitó el debate; pero, obviamente, no es suficiente. Pedro J. Ramírez consideró que Rajoy había ganado los tres primeros bloques, en los dos últimos habían quedado a tablas y que el final estuvo más logrado por parte de ZP; resultado dado por el cónyuge de la mujer arco iris: victoria de Rajoy a los puntos. Hombre, yo le diría al señor director que con esos datos que el expone de victoria a los puntos nada: la tunda fue contundente. Pero tengan en cuenta lo que les decía en las primeras líneas: la imparcialidad conlleva falta de credibilidad, pese a la evidencia de los hechos. Pisar huevos, siempre fue delicado. Ya saben.

26 febrero 2008

Por fin nuestros políticos deciden combatir la realidad con ironía. Quizá algún día lo hagan, incluso, con literatura. Mientras tanto, confórmense con esta maravilla:

Proemio:

Último tramo de la columna de ayer de Raúl del Pozo:

Lo importante es que recuerden donde (en referencia a los candidatos que se batirían en la noche de ayer en duelo) han perdido el paraguas. Digo esto por lo que ocurrió en Puerto Rico, 1963, cuando estaban exiliados Tierno Galván y Raúl Morodo. Uno de los fines de semana Raúl y un catedrático gallego se llevaron al Viejo profesor a los bares de alterne, que hervían de cubanas exiliadas y mamis de puerto. No pasó nada, pero unas semanas después Raúl y el gallego volvieron al club; una de las chicas sacó el paraguas y dijo:
-Tu amigo el viejito lo dejó.
Raúl llevó el paraguas al Viejo profesor y éste dijo:
-Lo habré olvidado en la biblioteca
Ninguno de los dos tiene vida secreta como Tierno, ni practica, que se sepa, las siestas del adúltero, pero los políticos deben de estar siempre preparados para decir que olvidaron el paraguas en la biblioteca, no en el puticlub
.

Estas líneas del Diario de Campaña de Gistau:

Contaba Norman Mailer que, en las vísperas del combate en Zaire, Alí y Foreman compartían por turno el mismo gimnasio para entrenarse. Y que Alí debía recurrir a las bromas y a las bravatas de buchón altanero para disimular el miedo que le daban las tremendas abolladuras que se encontraba en el saco golpeado por Foreman minutos antes. De igual forma, lo que Rajoy hizo en Burgos fue abollar el saco, ensayando el repertorio de golpes con los que aspira a ganar el debate…

La trama (primera parte):

Rajoy le dio un claro baño a ZP, es meridiano. El chico de las cejas sobresalientes, durante y tras el debate, no esbozó sonrisa alguna. Sin duda, en su fuero interno no había motivos para el orgullo: tan paseado en ocasiones menos necesarias. Si acaso todo lo contrario: se le vio tenso, espeso, incómodo, sin argumentos de peso. Sin embargo vistos los resultados de las encuestas, tan similares a los mostrados en el debate de los economistas, uno se desmoraliza, se inquieta e incluso se pregunta qué alberga el interior del ser humano español, siempre tan depurado.

Se puede entender que al eximio y castizo público le inspirase dudas Pizarro; éste, no tuvo su mejor noche. Pero lo de ayer fue abusar, un repaso de libro, un remojo de tomo y lomo. ZP, parecía un gatito asustado en su madriguera; se guarecía tras su propia chaqueta como un niño malo al que le reprochan su conducta y, en el fondo, comprende la reprimenda que le está cayendo. La prueba de la flagrante e hiriente derrota está, en mi opinión, en el análisis posterior: hasta los periodistas afines al PSOE dieron por bueno…un empate; ¡je! Eufemistas edulcorantes. Ni un solo periodista socialdemócrata dijo que ZP hubiera ganado el debate; criticaron con mayor o menor tino al gallego, pero ni uno solo, repito, dijo que ZP lo hubiera ganado . En otra igual no se habían visto en mucho tiempo. Que el rebaño propagandístico afín dé por bueno un empate, háganme caso, sólo puede significar que los golpes (permítanme el símil pugilístico) vinieron de todas partes (siendo Rajoy siempre el que golpeaba). Aun así, decepcionado me hallo: la gente vio mejor a nuestro presidente. En teoría no se debería poder tapar el sol con un dedo; aunque el personal progre en ocasiones lo pretenda y, al parecer, lo consiga.

Me preocupa la miopía general seriamente. Salvo que descubran a los socialistas robando (escándalo fondos reservados) o matando (GAL) creo, sinceramente, que el PP no va a ser capaz de echar a los progres de Moncloa ni a gorrazo limpio. Y eso que los únicos argumentos utilizados por érase un hombre a un talante pegado fueron: Aznar, el 1(9)1-M y la guerra de Irak; si, aunque parezca mentira, ZP se atrevió a meter el 11-M en el debate. Luego el PSOE denuncia que los que hacen uso partidista del terrorismo son los del PP, y alguno se lo cree. De todos modos hay que comprender que a ZP le convenía dramatizar: él mismo lo dijo. A nuestro presidente no le quedó más remedio que volver una y otra vez al pasado. Si bien, es normal: su política presente tiene poca defensa; y él, lo sabe.

Lo dejo. El tiempo se ha agotado por hoy. Continuará...

25 febrero 2008

Qué les voy a contar...

24 febrero 2008

¡Oh, la la! El nuevo fichaje de El Mundo: don Santiago González. Le da la bienvenida el chef. Pónganse cómodos: la mesa está servida.

Este par de morenos que, ni qué decir tiene, ya no albergan el mismo cuero cabelludo: han vuelto. No directamente, claro; sino su espíritu, su esencia, su forma de ver la vida...a través de un musical cuyos retazos pueden ver aquí y cuyos acordes nos devuelven a los años sesenta. A mí, siempre me ha parecido una época preciosa; incluso las mujeres estaban más guapas, sin contaminar. Su confidente, aún era el párroco del pueblo. Y el gremio de butaneros todavía no había alcanzado la categoría de mito entre los maridos; siempre tan, injustamente, desconfiados. Pasen un buen Domingo:

23 febrero 2008

Ni una sola reseña en los periódicos nacionales. Comprendo, que no se puede celebrar aniversarios todos los años; con el tiempo, se tiende a perder gas. Esa cuestión, se la dejaremos a parejas ñoñas y romanticonas que se diluyan en carantoñas y arrumacos cotidianamente. Aún más, entiendo que del hecho no haga mención el gobierno progre, pues no conviene ensalzar el papel de la monarquía que ellos tanto adoran; laureles sólo a la república, que fue pura, casta y útil (como mi vecina, aunque esta última es un poco golfa). Pero que ni PP ni medios recuerden este día de hace ya 27 años, símbolo imperecedero del triunfo de la democracia española sobre el tricornio dictatotial, y, lo que es más importante dada la última legislatura de talante antimonárquico: el papel de la corona en el mismo, tiene huevos. Con perdón.

Correspondencia/ Alejandro Machado Cordero.


NUEVE PALABRAS QUE LAS MUJERES UTILIZAN...

1.) Vale: Esta es la palabra que las mujeres utilizan para finalizar una discusión, cuando han decidido que ellas tienen la razón y ahora debes callarte.

2.) Cinco minutos: Si se está arreglando, significa Media hora. Cinco Minutos son sólo cinco minutos, si te han concedido Cinco Minutos adicionales para terminar de ver el partido antes de salir para ayudar con la compra.

3.) Nada: Es la calma antes de la tormenta. Significa Algo. Y deberías estar totalmente alerta. Discusiones que empiezan con Nada, normalmente acaban con Vale (Ver punto 1).

4.) No hay problema (también Adelante-hazlo o No-No me molesta): Es un reto, y no es darte permiso ¡Ni se te ocurra hacerlo!

5.) Gran suspiro: En realidad, es una palabra pero habitualmente los hombres no la entienden. Un suspiro alto y claro significa que ella piensa que eres idiota y se pregunta por qué esta perdiendo el tiempo discutiendo sobre Nada (Ver punto 3 para entender el significado de Nada).

6.) Muy bien: Esta es una de las frases más peligrosas que una mujer puede decir a un hombre. Muy bien significa que ella meditará cuidadosamente antes de decidir cómo y cuándo pagarás por tu equivocación.

7.) Gracias: Una mujer te agradece algo. No preguntes. No dudes. Sólo di De nada.

8.) Es igual (también Tu mismo): Es la forma femenina de mandarte a la mierda.

9.) Tranquilo lo he entendido: Otra frase peligrosa donde las haya, que significa que aunque la mujer ha dicho al hombre en repetidas ocasiones que haga algo, finalmente lo esta haciendo ella misma. Los acontecimientos posteriores empujarán al hombre a preguntar ¿Qué pasa? Para saber la respuesta de la mujer, ver punto 3.

22 febrero 2008

El sol, Asturias, el buen queso y una visión desagradable.

La tarde de ayer se presentaba, como otras muchas, sin nada de particular. El hecho de que el final de semana trajese consigo la interrupción de varios días pasados por agua, dado que el invierno no se ha caracterizado por una acentuada humedad, no mejoraba, al menos notablemente, la tarde. Atrás han quedado los largos, duros y fríos inviernos leoneses en que la pauta general, por todos asumida, era la bajada de temperaturas por debajo de los cero grados. El frío leonés era consustancial a la propia ciudad, como lo son su catedral y sus propios habitantes; tan identificados con el paisaje que a veces, para el observador ajeno al arraigado costumbrismo, se confunden.

Dicen que sólo hay una cosa que los habitantes del Principado de Asturias, tan verde, tan lozano y tan húmedo que casi lo estoy oliendo ahora mismo, envidian, anhelan y desean de esta tierra árida, rodeada de abruptas hoces, extensos páramos y, sólo vigorizada, por el incipiente verdor contemplado al sobrepasar el manzanal. Se trata del refulgente, cálido y vigorizante sol; cuyos rayos, al parecer, se muestran reticentes a franquear el Negrón. No les culpo. Asturias está teñida de verde; pero se trata de un verde oscuro y lóbrego, que entristece el espíritu de todo visitante por muy emprendedor que sea su ego. Por la misma regla, y recíproco cariño, tan sólo hay una cosa que los leoneses solicitan con el mismo fervor de Asturias, y, no hablo del hórrido olor que nos envuelve al llegar a Gijón con la toalla, las coca colas y el bocata de tortilla –España, ese país lleno de toreros- sino de sus playas, tan propiamente asturianas.

Todos los años, con la llegada de la época del bikini y la bermuda, la braga baja y el calzoncillo suelto, el sudor perlado y el lamparón estético: se produce la diáspora asturleonesa; los pueblos leoneses se llenan hasta la bandera de hijos de Pelayo: tan duchos en empinar sidras mientras malcantan su manido himno y a su querido Victor Manuel, siempre tan socorrido; así mismo, los camping y playas asturianas rebosan de leoneses ávidos de asturianas que, según el mito, se caracterizan por su espontaneidad y frescura en las relaciones interpersonales, tan decaídas por estos quejumbrosos pagos.

Pero les estaba hablando de la tarde de ayer, y el destino, la taumaturgia o la casualidad han querido que reseñe la tierra de las fabes, aun de forma tan sucinta. Ayer, como les iba diciendo, lució el sol. No se le podía echar de menos, pues mucho no había faltado. Aun así, el vaivén de las nubes, como el de las mujeres, en apariencia tan distinto al de las olas y, sin embargo, en su fondo tan parecido, siempre levanta el ánimo y alegra los corazones.

Me disponía a ir a clase. Como de costumbre, tenía un alocado baile de artículos en mi pensamiento; en la tarde de ayer: especialmente frenético. El hecho de ocupar las neuronas en estos menesteres arduos, plúmbeos y tediosos le impiden a uno, en ocasiones, observar y disfrutar los verdaderos placeres de la vida. Nunca se sabe la forma en que se presentan. Y hay que estar preparado: porque tampoco se sabe el momento en que llegan.

Bajé de mi casa y me encaminé al lugar donde posteriormente defendería lo aprendido. Apenas me percaté de los quehaceres que ocupan los días y la vida de los trabajadores de mi barrio. Me pareció ver al mecánico dialogar con un hombre de piel oscura. No quiero parecer racista, pero todos ustedes comprenderán que me estoy refiriendo a un negro. Y sin haberse implantado el carné por puntos de españolidad, pretendido por nuestro querido Mariano, discutía sesudamente con el especialista en sonsacar defectos a nuestro vehículo; aunque éste no los tenga. Yo diría que ese hombre ya no necesita carné de español, si acaso, cambiar de mecánico. Continué en mis andanzas y desventuras interiores. Como viene siendo habitual, salía con el tiempo contado de casa. Al llegar a la flamante rotonda de mi barrio, al lado del parque Quevedo –más flamante aun que la rotonda, si es que cabe tal- la vi. Se trataba de una imagen hermosa, pura, casta. Una joven señorita de pelo largo, liso y moreno, cara redondeada y tez pálida; tenía unos vivarachos ojillos negros flanqueados por grandes y expresivas pestañas. De su boquita, destacaban unos labios carnosos y bien proporcionados. Vestía un chándal ceñido azul oscuro. Mi ojo experto, infirió que tenía un buen ejemplar de culo. Me atreví a pensar en su, más que probable, ropa interior a juego; a buen seguro, de haberla encontrado a las tres de la madrugada en un pub se lo hubiese preguntado directa y descaradamente, pero las circunstancia hicieron que la escena ocurriese sólo en mi imaginación y, como enseñan en la ínclita y docta facultad de derecho: el pensamiento no delinque. Visiones semejantes levantan, incluso, las morales más socavadas. Me surge una duda: ustedes ¿han visto alguna vez un queso haciendo footing? Madre, madre.

Ya al volver del preparador, a donde me dirigí raudo tras la experiencia mística -pues nada en esta vida dura eternamente-, me encontré con la cara opuesta. Una señorita que, por decoro y buena educación omito su descripción, se encontraba haciendo una especie de molestas y asquerosas gárgaras momentos antes de expulsar su contenido en un sonoro escupitajo. Tuve la desagradable oportunidad de contemplar todo el proceso. Me horrorizó; huí despavorido a mi dulce, ingenuo y tierno hogar, y me acomodé en el sofá para ver una película de Tintín. Qué quieren: todo machote tiene sus debilidades. Es una lástima que haya mujeres tan poco femeninas ¿verdad? Dios no quiera que me cace un bicho de esos: antes muerto que sin quicio; coño.

21 febrero 2008

Interesante entrada en la wikipedia, sobre el Caso Dreyfus -y el origen del término intelectual-; término que, con su degeneración histórica, podríamos decir que se ha prostituido.

¡Ánimo, Manolo!

Parece mentira, que el debate entre el presidente y Mariano sea, prácticamente, prescindible:

Yes, we can

20 febrero 2008

Cuando hasta las hortalizas tienen su punto:


La desidia me ha vencido aun antes de empezar, y no merece la pena morir por ella. No todos los días nacen para escribir. A pesar del jugo implícito con que nos salpica la imagen: tan roja y tan fresca; para todos aquellos que, con frecuencia, elaboramos nuestro pensamiento a partir de un buen plato. Si no fuese por su forma darían, incluso, ganas de pegarle un mordisco. Sin embargo: eso, precisamente, es lo que ocurre cuando se pierden las formas; a menudo, tan subestimadas.

Lo dejo; mejor, probamos otro día. Con la puntita suele valer, casi siempre. Aunque, ciertamente, no sobre. Y todo sea por no hablar de política: me aflige profundamente.

19 febrero 2008

Lucio Anneo Séneca.

Yo no hago del sabio un hombre aparte, diferente de los otros; no lo considero libre de dolor, como una roca insensible. No pierdo de vista que está compuesto de dos sustancias; una irrazonable que siente las mordeduras, las quemaduras, el dolor; otra razonable que nada puede quebrantar en sus opiniones, apurar ni vencer. En esta última es en la que reside el soberano bien: tan incierta y vacilante como es el alma incompleta, es inmóvil y fija cuando se goza de ella en toda su plenitud.

Los verdaderos bienes son los que la razón procura: son más sólidos y duraderos; no pueden ni perecer, ni decrecer, ni amenguarse. Los otros no son más que bienes de convención: no tienen de común con los bienes más que el nombre; su esencia es muy distinta. Llámeseles, pues, ventajas; o en el lenguaje de nuestra escuela preliminares; pero sepamos que son sirvientes nuestros, y no partes de nuestra naturaleza; que son nuestros, pero que están por fuera de nosotros. Por mucha entrada que les demos, no los consideremos jamás sino como posesiones viles y subalternas, que no valen para poner en ellos ninguna vanidad.

Compara los semblantes de los pobres con los de los ricos. El pobre ríe más a menudo y más francamente; si tiene algún cuidado, pasa como una nube. Pero aquellos que son considerados los seres más felices, tienen por risa una mueca; su alegría es simulada, porque la tristeza los devora; y es su mal tanto más grave, porque no deben manifestar su pena; han de mostrarse contentos entre las preocupaciones que arrugan sus frentes y las pesadumbres que oprimen sus corazones. Su felicidad es un disfraz; arrancadles la careta y os inspirarán desprecio o lástima.

Entre muchas magníficas sentencias de nuestro Demetrio, hay ésta, que es en mí fresca, porque aún resuena en mis oídos. "Para mí, decía, ninguno me parece más infeliz que aquel a quien jamás sucedió cosa adversa"; porque a éste tal nunca se le permitió hacer experiencia de sí, habiéndole sucedido todas las cosas conforme a su deseo, y muchas aún antes de desearlas. Mal concepto hicieron los dioses de éste; tuviéronle por indigno de que alguna vez pudiese vencer a la fortuna.


Más aquí.

18 febrero 2008

Una verdadera lástima, es, tan mona; viéndola, se comprende el viejo y castizo axioma de las carretas. Podría ser, que actuase con retranca gallega y sarcasmo quevediano, aunque me parece demasiado rebuscado para su color de pelo, y, además, no es española. Y, a mí, que siempre me han tirado las rubias...

17 febrero 2008


Excelente e ilustrativo artículo en el suplemento cultural de ABC sobre la Filarmónica de Berlín. Leyéndolo, no he podido apartar de mí la imagen de los músicos del Titanic tocando mientras todo a su alrededor -barco incluido- se hundía. La música, por si no lo habían notado, es de las pocas expresiones artísticas que no tienen equivalente visual; no se puede reproducir en imágenes. Expresión ésta que facilita enormemente la comprensión, incluso, de lo más abstruso.

Por el contrario, su efecto emotivo es impresionante. Inevitable. Fantástico. El significado dado al leer un texto literario, contemplar un paisaje o recordar un momento de nuestra vida, varía grandiosamente al realizar dichos actos escuchando una música determinada; sin embargo: no pidan al intérprete de este arte, el músico, más compromiso del que le exige su partitura. El resultado, puede ser decepcionante.

16 febrero 2008

¿Cómo perdían la virginidad las hijas de los faraones?

Las mujeres de la realeza solían prometerse en matrimonio a una edad muy temprana y con hombres ya formados. Para preservar a estas niñas de los posibles desgarros que un marido adulto e impulsivo pudiera provocarles se les rompía el virgo con un artilugio más controlable, el desvirgador. La prueba del embarazo no era menos prosaica: se llenaban dos bolsas de tela, una con cebada y otra con trigo; si germinaba la primera, nacería un niño, si la segunda, una niña. Revista Muy Historia, nº15.

Condecoración a mi preparador. La verdad es que es un verdadero placer pasar por sus manos; lo fue en la carrera -me dio clase en tercero: derecho penal parte especial- y lo es ahora, en la oposición. Exigente, duro y perfeccionista; cuestión que, sin duda, se agradece -lisonjeo aprovechando que es improbable que algún día caiga en estas líneas (no me va el peloteo, me levanta dolor de estómago)-.

Todo un lujo para el mundo de la judicatura en general y para la ciudad en particular; intelectualmente, una pasada. Y va y aprovecha el acto de reconocimiento, uno de sus días mayúsculos, para reivindicar mejoras necesarias; a alguno de los invitados se le atragantaría el menú:)

Sin que sirva de precedente, y dado que un servidor antes de leer a Cela, Umbral, Dickens o Balzac, comenzó su andadura lectora con librillos "raros"; les dejo aquí la primera, segunda, tercera y cuarta parte de uno de los programas de Cuarto Milenio. Su temática: el misterio de las catedrales; además, habla del último best seller de Follet, y no me parece que hiera la sensibilidad de nadie que se considere lo suficientemente culto para ignorarlo. Buen fin de semana y mis disculpas por no colgar los videos directamente: no tienen código de inserción HTML; como diría uno de los ilustres invitados del programa: ¿casualidad?

15 febrero 2008

Llama poderosamente la atención, la cualificada aptitud de alguno de nuestros políticos para la farsa, el teatro, la farándula. El arte escénico se les da bastante mejor que la propia política. Como prueba tenemos la estrecha afinidad cognitiva y sentimental de nuestros actores, con una parte diferenciada de nuestros representantes políticos; y además, el acaecimiento de ciertos acontecimientos durante esta semana. Siempre es difícil discernir, dado el continuo chalaneo que nos rodea, la paja y el grano; pero en esta ocasión, evidentemente, no ha sido así. Y lo que más me divierte, sin duda, es su irrefutabilidad (a pesar del denuedo en el argumentario socialista; más cercano, como siempre, a la fe que a la razón). Me pregunto en que país vivirán algunos:



No me resisto, además, a poner por escrito el fragmento bambalino:

Zapatero: Lo que pasa es que yo creo que nos conviene que haya tensión.
Iñaki Gabilondo
: Os conviene muchísimo.
Zapatero: Yo voy a empezar, a partir de este fin de semana, a dramatizar un poco
Iñaki Gabilondo
: Ya

Leyendo el blog de Arcadi Espada –como siempre-, me encuentro, en su correspondencia, con un hombre que piensa en voz alta:

“Me he quedado pensando en lo del paternalismo estatal de los gobiernos genéricamente progresistas y me ha venido a la cabeza la ley de paridad tan aplaudida por las feministas. ¿Necesitan las mujeres que intervenga el Estado para desarrollarse personal o profesionalmente? Vale, hay mucho machismo pero ¿son incapaces las mujeres de defender sus derechos sin recurrir a papá Estado? Quiero decir, ¿qué idea tiene nuestro Gobierno de lo que pueden llegar a hacer las mujeres sin él? No sé, tengo la impresión de que nuestro Gobierno trata a las mujeres como discapacitadas cívicas y les proporciona una prótesis legal para que puedan caminar por sí mismas en un Estado de derecho”

A la hoguera con él.

14 febrero 2008

Feliz día de San Valentín:

-para el/la que siempre está enamorad@ y no puede evitarlo.
-para quien nunca lo ha estado.
-para el/la que vive en una nube todos los días, y no se plantea bajar de ella.
-para quien sueña despierto.
-para quien vive su amor en silencio.
-para el/la que vive su amor de forma sonora y, aun así, el/la destinatari@ del mismo no se entera.
-para quien aprecia.
-para quien se siente despreciad@.
-para el/la que se siente querid@.
-para el/la que cree que amor y amistad son incompatibles.
-para el/la que cree, en cambio, que lo uno y lo otro son indisociables.
-para los que leen el alma de las personas.
-para quien pierde el apetito.
-para quien se ruboriza al encontrar una mirada.
-para quien vive para el otro.
-para quien busca la felicidad eterna.
-para quien sólo lo hace de forma pasajera.
-para los/las coquet@s.
-para quien no puede apartar una imagen de su cabeza.
-para quien demuestra sus sentimientos.
-para quien cree tenerlos ocultos.
-para el/la que cree que nunca podrá volver a amar.
-para quien lo ha vivido todo.
-para quien la vida, en estos lances, no ha hecho más que comenzar.
-para el/la que derrama lágrimas de alegría.
-para quien llora amargamente.
-para quien ha encontrado lo que busca.
-para quien la búsqueda aún no ha terminado.
-para quien conoce a una persona especial.
-para quien se siente especial al lado de una persona.
-para quien la belleza ajena le deja sin palabras.
-para quien se siente como el patito feo y, sin embargo, es todo un cisne.
-para el/la realista.
-para quien persigue un sueño.
-para quien le da alcance.

En fin, todo sea por perpetuar la especie; Barry, si eres tan amable:

13 febrero 2008

Julio Camba.

Confieso mi ignorancia: a Camba no lo conocía; además, nunca había oído hablar de él. Esto, ya debía ser motivo suficiente para encarcelarme y no dejarme ver la luz durante una larga temporada. Parece increíble que, leyendo a Larra, González Ruano y, posteriormente, al maestro Umbral, nunca hubiese reparado en este notable artista de la pluma, pero así son las cosas. En una entrevista a Manuel Vicent, preguntaron al columnista, precisamente, por Camba. Yo, aguce oído, fije vista y tense rostro –algunos llaman a esta concatenación de actos: concentración-; me quedé con el nombre para buscar algo de información sobre el mismo y, si ésta era de mi satisfacción, sumergirme, obscenamente, en su lectura. Hace unos días, Arcadi Espada rescataba un artículo sobre el mismo en su blog, publicado en El País –el diario en que una tilde, puede cambiarlo todo- y, buscando en la red, he dado con esta página, de la que he sacado los párrafos escogidos que hoy he colgado. Nada más. Les dejo con el maestro:

Los españoles nos cauterizamos con ajo el paladar, así como los yanquis se los cauterizan con alcoholes helados y contradictorios, y si nuestras cocineras son tan aficionadas al ajo, no es porque este condimento les sirva para hacer una buena comida, sino, al contrario, porque les sirve para no tener que hacerla.

A cualquiera se le ocurre que, dado el estrecho parentesco de la carne con la mantequilla, la mantequilla ha de acompañar a la carne mejor que el aceite. [...] y si alguien me dice que sobre gustos no hay nada escrito, yo le contestaré que, por eso mismo, ya es hora de que se vaya escribiendo algo.

Este Madrid que odia el mar, constituye, a la vez, una mala capital política y una pésima capital gastronómica. La capital gastronómica de España debiera estar en la costa, y, especialmente, en una costa norteña, porque es del norte de donde le viene al mundo el apetito.

El primer francés que se comió un caracol no era, ciertamente, un epicúreo, sino un hambriento.

Cualquier destino, sin embargo, que le reserve el porvenir a la cocina francesa, lo cierto es que hasta ahora ninguna otra puede quitarle el cetro, al que daremos, si ustedes quieren, forma de trinchante. [...] El último pinche francés tiene categoría de doctor en ciencias culinarias frente al cocinero más enpingorotado de cualquier otro país.

En Florencia hemos comido como prebostes; en Roma como cardenales (los papas, muy viejos, por lo general, cuando ascienden a la silla de San Pedro, comen con excesiva moderación).

La cocina alemana es una cocina muy pobre, no cabe duda. Alemania tiene muy poco mar, y si el káiser Guillermo puso un día en el mar una cantidad de submarinos que no estaba en proporción con sus costas, no pudo poner, en cambio, ninguna cantidad equivalente de langostas ni de rodaballos.

Carnes, carnes excelentes, preparadas del modo más sencillo. Carnes y pescados: tal es la base principal de lo que llamaremos cocina inglesa. Luego viene una serie de papillas, cremas, sopas de leche, confituras y mermeladas, alimentación puramente infantil que nos revela al pueblo inglés como un pueblo que no ha alcanzado aún la mayoría de edad.

Cuando todo el mundo trata de ensanchar los horizontes de la cocina ensayando cruces animales e injertos vegetales, remontando hasta sus orígenes el curso de los ríos y buscando una pesca abisal en el fondo del océano, he aquí a los vegetarianos, quienes no sólo pretenden echarnos agua en el vino, sino que se proponen a la vez quitar de nuestra mesa todas las tajadas para dejarnos únicamente algo de lechuga o escarola. ¿Qué hay, señores? Poco apetito ¿eh? Lo sentimos mucho, pero nosotros por ahora todavía podemos darle trabajo al diente.

Si la obesidad es opuesta a la reproducción de las especies, como pretenden algunos doctores de escaso apetito, que, considerándose personificación de la Ciencia, quieren elevar su desgana a la categoría de norma general [...] diga usted que los hombres que engordan son, precisamente, los sensuales, y que el que sea capaz de quedarse con ganas ante un buen plato por temor a engordar, se quedará también con ganas ante todas las otras cosas agradables que hay en la vida.

Probablemente, en España se podrían obtener muy buenos vinos, pero lo primero sería que quisiéramos obtenerlos y que, en vez de aspirar a recoger cada año en tal o cual parte cien hectolitros de venta segura, nos resignásemos a recoger tan solo, cada seis o siete años, veinticinco hectolitros de venta problemática.

En el boardign-house donde yo vivía, la cena sólo se diferenciaba del almuerzo por la ropa que adoptábamos para tomarla. Como la señora de la casa no variaba nunca nuestros platos, nos hacía variar nuestros trajes, y la monotonía culinaria del establecimiento se compensaba así con su diversidad vestimentaria.

En casi todo el interior de Castilla, al pescado se le llama fresco, pero no al pescado fresco, sino al pescado podrido. [...] El bacalao, en efecto, o la mojama no se corrompen, y de aquí el que al pescado podrido se le llama fresco para distinguirlo de los pescados curados.

Los pueblos tienen siempre los gobiernos y los restaurantes que se merecen.

¡Absurdos restaurantes estos de Madrid, con una pequeña cocina familiar y una sala enorme para banquetes, bodas y bautizos! [...]Para que usted elija depositarán sobre su mesa un tratado de Historia Natural en varios capítulos: Aves, Pescados, Carnes, Mariscos, Legumbres, Caza... Es la lista de las cosas que pudiera haber en el establecimiento si fuese la época debida. [...]Ya sé que más de un establecimiento acostumbra a sevir a sus clientes grandes paellas a la valenciana los lunes, pote gallego los martes, callos a la andaluza los miércoles, fabada asturiana los jueves, bacalao a la vizcaína los viernes, etc. Pero eso es política federal más que cocina regional.

La primera fabada que yo he tomado en mi vida me la ofreció en Somió don Melquiades Álvarez, y era tan buena, que a causa de ella estuve a punto de ingresar en el partido reformista.

La Historia no está determinada únicamente por la necesidad elemental de comer, sino, además, por el deseo artístico de comer bien.

Lúculo era un gran general que hacía rendirse por hambre a sus enemigos, y por satisfacción a sus amigos.

¿Qué rato pasaríamos si un ama de casa nos sentará a su mesa sin presentarnos previamente a su familia ni a sus invitados? Pues peor aún será el que nos oculte la personalidad de los manjares que nos sirva. A la hora de comer hay que saber tanto lo que se come como con quién se come, y cuando nuestros anfitriones se nieguen a decírnoslo será cosa de llamar, según los casos a la Dirección General de Seguridad o al Laboratorio Municipal.

La comida popular, buena o mala, debe constituir para el viajero un dato de tanto valor como el paisaje, con el que guarda siempre una íntima afinidad. Lo uno explica lo otro, y el automovilista que se ponga a comer caviar en la paramera de Ávila no comprenderá la solemnidad de la paramera ni apreciará tampoco la exquisitez del caviar, y será al mismo tiempo un pésimo viajero y un gastrónomo abominable.

Los curas gallegos tienen siempre la casa llena de vituallas. Sus feligreses saben que el hombre más santo peca, por lo menos, diez veces al día, y les complace ver al párroco incurriendo en el pecado de gula como una garantía de que no incurre en otros pecados.

No se lleve usted nunca, durante la comida, el cuchillo a la boca y reserve para mejor ocasión sus habilidades de tragasables.

12 febrero 2008


Hay imágenes que, por sí solas, evocan la primavera; adelantan las estaciones y sus efluvios, y nos embriagan como los cantos de las sirenas en las leyendas marineras. Cuando las ves, sientes la suavidad de su tacto; un agradable aroma, sólo equiparable al que se desprende de un jardín de rosas; y esa emanación esotérica, misteriosa y nocturna que, de cobrar vida, desembocaría en lujuria prohibida de inefable placer e indeleble gozo.

Es lo mínimo que se puede sentir, y contar, dado el tradicional recato de esta bitácora, cuando contemplamos a Charlize Theron. Se desconoce, desde la noche de los tiempos, el sexo de los ángeles; pero deleitándonos con su dorado bronceado, su carita redonda y risueña, la luminosidad cegadora de su sonrisa y, sus deliciosos y encantadores hoyuelos –permítanme que no continúe con la descripción por debajo de su cara, me faltarían adjetivos, y, lo que es peor, me tildarían de pervertido-, podríamos hacernos una idea de la onomástica celestial en uso.

No es fácil calificar ciertos rasgos estéticos o faciales de universales; pues cada cultura, país o región, tiene unos guapitos de cara determinados, y, los múltiples cánones de belleza, implantados por abuelas de todas partes del mundo, con denominación de origen, son variados, diversos, genuinos. En cambio, en Charlize tienen cabida todos ellos, y alguno más. Si la contemplación empachase, viviríamos en un mundo obeso, grueso, gordo, orondo. Pero de todos es sabido, que nadie vive comiendo sólo con los ojos.

Después de estas palabras créanme: lo digo, con el pesar de un chiquillo al que le han prohibido ver a Espinete y su tropa. Es una lástima que una belleza de este calibre, elegancia y clase, hable. Y lo haga, además, de esta manera: “adoro Turquía y su capital, Budapest”. Mi decepción, en el sitio húmedo y oscuro donde se alojan los gozos defraudados. La verdad, es que las metáforas nunca fueron lo mío.

10 febrero 2008

Lo más triste, penoso, lastimoso y conmiserativo para todo entrevistador que se precie, independientemente de la tendencia ideológica con la que se sienta identificado, es que al terminar la entrevista, el entrevistado, se despida con sus posaderas húmedas, pegajosas, casi irritadas. Cuando se llega a una edad, los lametazos en ciertas partes intimidan; pero lo que realmente perturba, más aún, es el hecho de que además se televisen.

El periodismo: esa ciencia, en ocasiones, tan obscena. Desde luego, no seré yo quien aplauda.

Gonzalo Rubalcaba & Cia (con mayúscula).

09 febrero 2008

Si las cuatro piezas del triángulo superior son las mismas que las del inferior, ¿por qué sobra un espacio? ¿Cuál es el secreto de este extraño puzzle? Aunque los triángulos parecen iguales, fíjate que el lado superior tiene una inclinación ligeramente distinta. El pequeño espacio a lo largo de toda la línea es igual al del pequeño cuadrado que falta. Una vez más, la vista nos engaña. Encontrado aquí, hay muchas más.

08 febrero 2008

"El desdén ibérico no presta gran atención a estos cataclismos, pero el cierre de un blog no es un asunto cualquiera. Ahí, detrás de la ventana, hay un hombre que escribe cada día la página miniada de un libro. Llega puntual y concreto, lo abre, se inclina y trabaja un rato. Luego levanta la cabeza y se va. Un día ya no vuelve. Tal vez ha decidido que el libro se ha acabado: para remachar su ingenuo patetismo le pone unas letras que dicen FIN. Pero un blog no es un libro. Un blog sólo se interrumpe, pareciéndose peligrosamente a la vida". Arcadi Espada.

07 febrero 2008

Nuevo director de ABC.


Leyendo, y disfrutando, la columna de Raúl del Pozo, me entero de que Zarzalejos deja la dirección de ABC. Llego a casa y busco información: nada especifican sobre su futuro. Simplemente, el grupo Vocento acepta su dimisión. Una dimisión nunca se acepta sin motivo fundado, y, por supuesto, mucho menos se ofrece. Pienso que mucho habría que engañarse para que Don Parné no haya tenido algo que ver, no hay cama que éste no pruebe. Sinceramente, lo echaré de menos en su Tercera dominical. Tenía oficio, elegancia y altura intelectual; no es poco: vivimos tiempos oscuros -intelectualmente hablando-.

Toma el relevo Ángel Expósito -hasta ahora responsable de la agencia de noticias Europa Press-. Desconozco si tiene envergadura suficiente para afrontar un reto de estas características; aunque lo sospecho: no creo que sea la solución. El problema de ABC no es sólo un cambio de formato, organigrama o dirección. Tiene que ver, más bien, con su fondo, con su esencia; es decir: con todo aquello que el nuevo director no va a poder tocar. De todos modos espero con ansiedad el nuevo aire, que lo habrá, y espero notarlo; dado que el cambio en El País sigo sin percibirlo, lo que me preocupa y aflige; creo que voy a ser el último de la clase en enterarme.

El momento post:


Y su ritmo:

Mucha Carla, pero...

Elemental, querido...

06 febrero 2008

2008.


Los zorros rosas. Más aquí. Aunque no lo parezca, se trata de gente seria, culta, con inquietudes. Hubo, incluso, pique con los zorros tradicionales: los negros. Pero ya se sabe, hay que dejar paso a las nuevas generaciones. Además, nosotros llevábamos hasta caballos. Qué gorda, madre, qué gorda.

05 febrero 2008


Esto es lo que muchos piensan sobre el cine español, pero sólo unos pocos denuncian: Ignacio Camacho, quién si no. Existe la opinión, generalizada, de que nuestro cine es cómico y campechano; como el protagonizado, antaño, por Landa, Martínez Soria y la caterva de cantautores de andamio chulapo. Sin embargo, la hilaridad cinematográfica española, en la actualidad: es rancia, insulsa y está cargada de crítica política y social unidireccional. Esto es: la derecha tradicional, la religión y el nivel cultural de un país del que la industria cinematográfica desciende. Quizá no se han dado cuenta, aún, de qué es lo que interesa al espectador. Se entiende que nuestro cine no llegue, no cale o no guste al foráneo; pero preocupa, e inquieta, el mismo resultado en un público, tan selecto, como el nuestro.

El cine español es una copia, mala, de nuestra buena literatura; cuando había tal en nuestro país. Y, como tal, esperan un reconocimiento de posteridad. El brindado hogaño no terminan de creérselo, cuando es poco probable, que mejore en tiempos venideros.

04 febrero 2008

Día mundial contra el cáncer.

Copio aquí algún párrafo interesante del suplemento del Sábado, del periódico El Mundo, Yo Dona. El artículo no bucea en los nuevos adelantos, más de lo mostrado icto oculi en los párrafos reproducidos; aun así, se infieren ciertos avances, lo que ya es algo:

Frente al 44% de hombres españoles que sobreviven más de 5 años al cáncer tras ser diagnosticado, hay un 56´4% de mujeres y un 76% de niños que lo consiguen. Esto se debe a que la primera causa de muerte por cáncer en los hombres es el de pulmón, uno de los más agresivos, junto con el de páncreas. En el caso de los niños, la alta supervivencia se explica porque los tipos de cánceres más comunes en ellos (30% de leucemia, 30% tumores cerebrales y, el resto, linfomas, tumores óseos, neuroblastomas, tumores de Willms o sarcomas) son genéticamente homogéneos en su constitución, a diferencia de los más comunes en adultos, como el de colon, mama, pulmón o próstata. Esa característica, sumada a la mayor tolerancia de los niños a las terapias y medicamentos, hace que la eficacia de los tratamientos sea mayor.

Hace apenas 2 semanas, Olivia e Isabella, dos gemelas británicas idénticas, aparecían en una foto convirtiéndose en noticia. Se hicieron famosas porque una de ellas, la primera, tiene leucemia, no así la otra. Un equipo de científicos comenzó a investigar el caso y, gracias a su estudio, se han desvelado las claves de esa enfermedad en los niños, lo que ha abierto las puertas para crear medicamentos específicos contra las células que la generan e incluso, encontrar las causas que provocan otros tumores…

…los nuevos escáneres, como la tomografía por emisión de positrones, la tomografía axial computerizada o la resonancia magnética, son capaces de rastrear la presencia de las células tumorales con precisión. Esta información es clave para conocer el estado de un tumor, distinguir si es benigno o maligno, elegir la mejor opción terapéutica y valorar la eficacia de los tratamientos de radio y quimioterapia”.

03 febrero 2008


"En una de las circunstancias más difíciles de mi vida, un periodista me preguntó cuántos amigos había perdido en la adversidad, y yo le contesté que ninguno. Como en los momentos duros hay muchas personas que fallan e incluso nos niegan, el periodista se quedó bastante atónito y tuve que explicarle que, según mi experiencia, nadie falla si sabe uno qué esperar de cada persona y no pide peras al olmo". Carmen Posadas. Su artículo entero aquí. Escribe cada quince días en el suplemento hebdomadario del ABC; la lectura de sus artículos es un verdadero placer, siempre se saca provecho de los mismos.

Aunque en mi opinión, en esta ocasión, la faltó cogitar de forma más profunda sobre la compleja tarea de averiguar, precisamente, qué podemos esperar de cada uno; quizá lo más difícil, porque la respuesta certera sólo nos la da el tiempo. El resto, sólo son conjeturas; dado que el conocimiento sobre alguien o algo, al final, es tan etéreo...

02 febrero 2008

De la nocturnidad y la vida.

La noche y sus elementos, muchos en cantidad y en variedad, confunden. Se trata de una confusión crónica y, en muchos casos, genética; para la cual, de momento, no hay cura conocida. No quisiera enfatizar las consecuencias, de índole pecaminosa, de esta confusión; tampoco su duración, claro. Aun así debe tenerse claro el origen, para afrontar posteriormente el problema.

Presumo de miopía y, créanme, a pesar del dicho: no carezco de ella. Esta, desde luego, no me sirve como disculpa ante mis seres más queridos, con lo que mucho menos, me servirá ante un desconocido; más, si éste pertenece a ese género sensible, delicado, caprichoso, frágil y poético cuyos componentes, si no me falla la memoria, reciben el nombre de mujeres.

Ahondando en la cuestión, deberían preguntarse por la subjetividad de la confusión; esto es, por el sujeto confundido. Lo percibido suele ser exógeno, artificial e incierto, pues mirarse a uno mismo marea, y, en ocasiones, intimida; lo cual lleva a caer, deliberadamente, en uno de los asertos bíblicos más gastados, no tanto por el tiempo, como por su uso: la paja, la viga, y la ubicación dada a ambas.

Las dudas, que acompañan a todas partes, se convierten muchas veces en un compañero fiel, noble, infatigable y molestamente pegajoso. Esto ocurre durante todo el día pero, sobre todo, se acentúa con la oscuridad, se corona en la noche.

Estas reflexiones en voz alta me llevan a cuestionar mi capacidad, cada vez menor, para reconocer a una taruga. Una taruga titulada, que siempre tienen un toque exótico, llamativo y resultón. Carecen de luz propia, pero refulgen como los neones fluorescentes de un lupanar. Su revestimiento, su carrocería, su percha: camelan e inducen a indagar, a investigar, a arañar un poco qué es lo que hay bajo la superficie, qué se erige entre el humo, qué se encuentra tras las cortinas, qué sorpresa nos ha podido deparar la noche y sus alocadas circunstancias. Un consejo: tiene narices, pero no hablen a una estudiante de filología de libros, se pueden llevar una sorpresa; tampoco mencionen que manejan bien la lengua, no lo pillan. Y sí, la amiga fea siempre constituye un impedimento, aunque el fin sea loable y bendito; muy bendito. Es entonces, como el niño con su paquete de patatas y la correspondiente papeleta de rasca y gana, cuando nos llevamos una desilusión: sigue buscando. Claro, qué esperábamos encontrar en el interior de un paquete de patatas.

La noche, la miopía, las mujeres y la confusión alcanzada: son una serie de ingredientes intrínsecos e indisolubles de un mismo capítulo; parte, minúscula, de un gran libro llamado La vida. Este libro tiene una peculiaridad: está en blanco, y, lo escribimos, conforme vamos viviendo. Nadie sabe el grosor del libro. Nadie sabe su contenido; éste, se va averiguando página a página, día a día, step by step.

Y yo que presumía de cierta psicología, ¡je!; viviendo y aprendiendo. Y cambiando de principios, por supuesto. Cojan hábito de lectura: es muy recomendable.

01 febrero 2008

Los guirrios de Llamas de la Ribera.

La privilegiada situación de Llamas de la Ribera, en la margen derecha del río Órbigo, cerca de la confluencia del Luna y del Omaña, en terrenos con abundantes fuentes, y en cuyos aledaños se encuentran los llamados yaguazos , por su textura pantanosa, favorecieron el asentamiento de pobladores de procedencia nórdica durante la Edad Media. La influencia cultural de estos hombres, en su mayoría astures de raigambre céltica, propició la celebración de los carnavales de Llamas, con unas particularidades únicas en nuestro país.

Durante los mismos se realiza una serie de actos que con frecuencia tienen aire de juegos de ritmo violento, como es la danza de los guirrios, con movimientos desacostumbrados cuya violencia establecida va unida al desenfreno de hechos y palabras; el carnaval de Llamas, se enmarca dentro del contexto de las mascaradas del País Vasco, de Asturias y de Galicia, precisamente, por ser Llamas una encrucijada de caminos. Hay que destacar en la mascarada, la proyección guerrera conectada con la caza, la magia, las fuerzas desatadas y desconocidas de la naturaleza, y el simbolismo del color, del salto y de la danza.

El guirrio calza albarcas de piel animal, con unas correas cruzadas sobre los calcetines; un par blanco y otro negro, de lana de oveja, el blanco mas corto, permitiendo que salga un borde negro del calcetín que hay debajo. Vestido de blanco, camisa y pantalón de lino de estas tierras, rodea su cintura con una correa repleta de esquilones, entre ocho y diez, de tamaños distintos; éstos, son de cobre. Estas esquilas y esquilones, resto de su antiguo estado de ser pueblo de pastores, tenían el fin de que con su algarabía en la danza provocasen la huída de los malos espíritus, y librasen sus rebaños de rapiñas y contratiempos.

Cruzando el pecho, lleva puesto la señal de color de una dama con la que seguramente tiene que bailar. El atuendo del guirrio se completa con unas tenazas, como aquellas que en la costumbre del norte de España usa el gatia o gato; los de Llamas, y cuando el rito del guirrio ha perdido su simbología primera, las usan para apresar al convecino y arrancarle una propina que antes eran huevos, panes, gallos u otros elementos. El cesto que antes portaba el guirrio para recoger la donación del apresado con la tenaza, se convirtió luego en pipa, y a cambio de tabaco, aquél, se libraba entregando una pequeña moneda.

Complementos más visibles del traje son la vejiga y un rabo de cordero, que antes fueron crines de caballo o de animales cazados durante el invierno. El rabo de cordero comienza a usarse durante la Edad Media, y su simbología era la pureza. La vejiga era una parte del cerdo que se hinchaba de aire, de origen tan remoto como la propia máscara y el guirrio, y servía para intimidar a los malos espíritus; su simbología es el aire. Posteriormente, ya se utilizó para golpear a las mujeres o jóvenes de la aldea.

La máscara es el elemento de belleza más impresionante y significativo; las máscaras originales eran de piel con un solo abanico, posteriormente, para darle colorido, se colocaba alrededor de la máscara, el plumón de gallos y gallinas. En la actualidad, las plumas y la piel se han sustituido por cartón y flores, y se le han añadido tres abanicos más, dos laterales y otro trasero, este último de mayor tamaño que los demás.

Ya vestidos y puestos en formación inician la mascarada, encabezadas por el aguirnaldero, a cara descubierta, con capa, pipa, sombrero y bastón de mando. Cuando en zonas como Galicia o León intervienen las mujeres, éstas, hacen de bellas o madamas, y en ciertos lugares hay un tipo de enmascarados que bailan ajenos a los movimientos bruscos del resto del grupo en el centro de la plaza o en el círculo formado por los guirrios saltarines. Se establece así, la contraposición de cierto protocolo en la danza; un apaciguamiento en contraste a las guijonadas constantes.

Durante siglos, en todo el ámbito de la Europa cristiana, se han celebrado las mismas fiestas en ciclos fijos o móviles; el periodo de carnaval se ha iniciado, más o menos calladamente, a partir de las navidades. La aldea tiene en carnaval un aire más primitivo, vital, y, en cierto modo, más rudo y descarnado; pero cada grupo actúa en su medio: el campesino, cerca de la naturaleza, concibe el ciclo de las cosas desde un ángulo propio.

Espero que les haya gustado. El relato lo he sacado de una cinta de vídeo en la que, como han leído, se explica pormenorizadamente el origen y proceso de la tradición. Ahora bien, nada mejor que verlos en vivo y en directo; si se animan, pueden acudir a la cita este Domingo a partir de las 17:30, ¡hay chocolate con frisuelos gratis! Feliz carnaval, buen fin de semana y gracias por leerme.


ACTUALIZACIÓN: quién me lo iba a decir, los carnavales de mi pueblo en Youtube.